LA REPRODUCCIÓN

REPRODUCCIÓN

La reproducción es la función que permite al ser humano perpetuarse como especie, comprendiendo los procesos que dan lugar a la formación de un nuevo organismo.

Es una fecundación interna ya que los gametos masculinos y femeninos se unen dentro del aparato reproductor femenino.

La fecundidad femenina está íntimamente relacionada con el ciclo menstrual. Como podrás imaginar, hay determinadas etapas en la vida de una mujer en las que se la considera fértil, es decir puede quedarse embarazada y otras en las que no.

Hasta que no se alcanza la pubertad y se produce la menarquia, es decir empiezan a madurar los primeros óvulos, no hay posibilidad de embarazo. Como has visto anteriormente, esto ocurre entre los 11 y los 14 años. Recuerda que a veces puede haber ovulación sin que haya aparecido la primera regla.

A partir de la pubertad, una vez que aparece el ciclo menstrual, hay determinados días en que no es posible la fecundación y otros días en que sí. Generalmente sólo existe posibilidad de que se produzca la fecundación en la fase del ciclo menstrual en que se ha producido la ovulación, a partir del día 14 aproximadamente, y sólo durante 1 a 3 días, aproximadamente, después de la ovulación; el tiempo en que el óvulo puede sobrevivir antes de degenerar. En los demás días del ciclo, generalmente el óvulo no ha madurado todavía o bien está degenerando y por tanto no puede ser fecundado.

A partir de la menopausia, hacia los 50 años aproximadamente, cuando dejan de madurar los óvulos, no es posible quedarse embarazada.

El desarrollo del nuevo organismo requiere tres procesos:

  • La fecundación.
  • El embarazo.
  • El parto.
La fecundación



La fecundación es la unión de un óvulo de la mujer con un espermatozoide del hombre para formar una célula huevo o cigoto (zigoto). 

Una vez formados los gametos, para que se produzca un nuevo ser es necesario que el óvulo y el espermatozoide se junten y fusionen, a este proceso se le denomina fecundación. En la especie humana la fecundación es interna, es decir se produce dentro del cuerpo de la mujer, concrétamente en las trompas de Falopio.


Para ello es necesario que se produzca la copulación o coito que consiste en la introducción del pene en la vagina y la posterior eyaculación del semen (aunque, como veremos más adelante, en la actualidad existen técnicas de reproducción asistida mediante las cuales pude darse una fecundación in vitro, en el laboratorio).

Si no hay ningún obstáculo (algún método anticonceptivo) el semen pasará por la vagina, atravesará el útero y llegará a las trompas de Falopio. De los cientos de miles de espermatozoides, sólo unos pocos llegarán hasta el óvulo y solamente uno podrá atravesar la membrana plasmática del óvulo y producirse la fecundación. Todos los demás espermatozoides son destruidos en el viaje. La razón de producirse millones de espermatozoides es para garantizar que, al menos uno, pueda alcanzar el óvulo.

El óvulo fecundado es una nueva célula que vuelve a tener 46 cromosomas, ya que tendrá los 23 cromosomas del óvulo más los 23 del espermatozoide y se denomina cigoto. .Los óvulos y espermatozoides son los gametos sexuales, por lo que son células
 haploides (n), es decir, con la mitad de cromosomas (material genético) que el resto de las células del cuerpo. Los gametos se han formado mediante un tipo de división celular llamada meiosis. Cuando los gametos se unen forman un cigoto diploide (2n), con el mismo número de cromosomas que todas las células del cuerpo.



El cigoto comenzará un viaje hasta implantarse en el útero. Durante este viaje comienza a dividirse y empieza a desarrollarse como embrión. A partir de las 16 células se empieza hablar de mórula, ya que su aspecto recuerda a una mora.

A continuación algunas células continúan dividiéndose y desplazándose y pasan a un estado que se denomina blástula.

En este estado es como llega al útero y se produce la implantación o nidación.

La fecundación comprende tres etapas:

  • Aproximación de los gametos.
  • Tras una relación sexual, de los 300 millones de espermatozoides que contiene el semen, sólo ascenderán unos 300.000 desde el útero a las trompas de Falopio.  
  • Atraídos químicamente, sólo unos 100 espermatozoides llegarán al óvulo y sólo uno de ellos lo fecundará. 
 Unión de los gametos

El espermatozoide rompe, con las enzimas del acrosoma, las capas protectoras del óvulo e introduce su núcleo, que se fusiona con el del óvulo para formar la primera célula diploide del nuevo organismo, el cigoto.

Tras la fusión de los núcleos, la membrana del óvulo fecundado impedirá la entrada de nuevos espermatozoides y el cigoto comienza a dividirse.
División del cigoto

El cigoto se divide numerosas veces para llegar a ser una masa de células, la mórula, que a su vez se desplaza desde las trompas de Falopio hacia el útero.

El periodo fértil coincide con la ovulación y puesto que la vida de los espermatozoides es mayor que la del óvulo, los días fértiles comprenden desde tres días antes y hasta tres días después de la ovulación.
  
El embarazo o gestación

El embarazo comprende todo el proceso que lleva a formar a un nuevo organismo dentro de la madre.

La primera señal de que se ha producido un embarazo es que desaparece la menstruación. El embarazo es la fase de desarrollo del óvulo fecundado, este proceso dura 9 meses y se realiza en el útero.



La gestación es el período de tiempo que hay entre la fecundación y el parto. El cigoto formado tras la fecundación empezará a crecer rápidamente, dividiéndose por un tipo de división celular llamada mitosis: primero dará 2 células, después 4, 8, 16, 32 y así sucesivamente, al mismo tiempo va viajando por la trompa de Falopio en dirección al útero.
A las pocas horas de la fecundación el cigoto parece una mora, de ahí que se le llame mórula. Ésta sigue su crecimiento y aproximadamente 7 días después de la fecundación llega al endometrio, el cual estará muy desarrollado. Se intentará unir a él para empezar a nutrirse a partir de sus numerosos vasos sanguíneos. A este proceso se le llama implantación (o nidación) y si tiene éxito, se considera que la gestación o embarazo comienza, y a la masa de células que se ha formado se le llama ahora embrión.

El cuello del útero se taponará con un moco muy espeso para impedir la entrada y proteger al embrión.

          
Cuando la blástula se implanta en el endometrio uterino, se desarrolla el saco amniótico que albergará al embrión. El saco amniótico está lleno de líquido amniótico que amortiguará los posibles golpes que reciba.

Entre el útero y el embrión se desarrollará la placenta que permitirá alimentar al embrión y retirar y eliminar los productos de desecho, también actuará como barrera defensiva. La comunicación entre la placenta y el embrión se realiza a través del denominado cordón umbilical, por el que pasan dos arterias y una vena.
 

A lo largo de los nueve meses de embarazo se van produciendo cambios morfológicos y fisiológicos:

Comprende varias etapas:

  • La nidación
  • Primer trimestre
  • Segundo trimestre
  • Tercer trimestre
Nidación

Cuando llega al útero, la mórula se ha transformado en una estructura llamada blastocisto, que se fija al endometrio en un proceso llamado nidación, dando comienzo al embarazo.

El blastocisto se desarrollará y dará lugar a una estructura nueva. Ésta presenta: 
  • El embrión: Es la parte que inicia su desarrollo hacia un nuevo organismo. 
  • El amnios: Forma una cavidad que envuelve el embrión y que se llena de un líquido protector, el líquido amniótico. 
  • La placenta: Es la zona de contacto que permite el intercambio de sustancias entre la madre y el embrión, quedando conectados ambos por el cordón umbilical. La madre cede nutrientes y oxígeno y el embrión pasa el dióxido de carbono y sustancias de excreción. 
Desde la fecundación a la nidación han pasado unos siete días, mientras que el embarazo completo tiene una duración media de unas 40 semanas, unos nueve meses.

 

Primer trimestre

Implantación en el útero y primeras fases del desarrollo. Inicialmente se produce un rápido crecimiento de las células que conducen a la formación de tejidos y órganos internos.

En la cuarta semana el corazón empieza a latir y se distingue la cabeza. Pesa un gramo y está unido a la madre por la placenta.

En la octava semana se distinguen las extremidades y los ojos, por lo que a partir de este momento se le denomina feto. Pesa 3 gramos.

La mujer embarazada suele presentar náuseas, cambios de humor y modificaciones en el sentido del olfato y del gusto.

Crece rápidamente pero de forma desigual, crece sobre todo la cabeza que se distingue del resto del cuerpo. A partir del tercer mes recibe el nombre de feto, mide aproximadamente 3 centímetros y pesa unos 10 gramos.


 

Segundo trimestre

El vientre de la mujer crece al aumentar el tamaño del útero. Hacia el quinto mes el desarrollo del vientre llega hasta el ombligo. Las mamas aumentan de tamaño y la mujer nota los movimientos del futuro bebé, que ya mueve los brazos y piernas. Todos los órganos están perfectamente desarrollados y el feto crece. Al final de este trimestre mide cerca de 30 centímetros y pesa 1 kilo.

Su cuerpo está recubierto de un vello fino llamado lanugo.

También es posible reconocer el sexo del feto.

El vientre de la madre es ya abultado, aumentando también el tamaño de las mamas.



  Tercer trimestre

El útero alcanza el máximo desarrollo. Los órganos maduran, sobre todo los pulmones y el tejido adiposo bajo la piel. El feto cambia de postura y se sitúa boca abajo. A partir del sétimo mes el feto ya sería viable y podría sobrevivir si naciera en ese momento. Al final del embarazo el bebé puede medir entre los 45 y 50 centímetros y pesa entre 2,5 y 3 kilos.

Un proceso de gran importancia en el feto es la maduración de los pulmones, que le permitirá respirar nada más nacer.

En la semana 37 el nuevo organismo está completamente formado y pesa ya 2,5 kilos.

El feto oprime los órganos abdominales de la madre, desplazando a diversos órganos internos de su posición natural.


 

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